Río Cabrera
En las cristalinas fuentes
De las montañas nevadas
En la planicie del valle
Brotan las aguas salvajes
Que caen a la Laguna.
Arroyos que corretean
De una vertiente y de otra
Esperando sosegados
La salida del mayor lago.
En el lago de la Baña
Se agitan placidamente
Antes de coger carrera
Por la extensa pendiente.
Se duermen en el recodo
Al llegar a la llanura,
Saciando a los sembrados
Ávidos de frescura.
Se recrea en el paisaje,
De las montañas agrestes
Reflejadas en sus aguas
Oscuras e imponentes.
Toma de nuevo carrera
Por las estrechas gargantas
Lajas de pizarra y cuarzo
Son lamidas por sus aguas.
En orificios oscuros
Que el agua ha desgastado
Se depositan los restos
De años ya olvidados.
Río Cabrera que fluyes
Sin detenerte a nada
Mudo testigo has sido
Hasta de tropas romanas.
Cansado ya de pendiente
De nuevo ya en la llanura
Se le unen los torrentes
Que vienen de otra altura.
En las praderas del valle
Donde pacía el ganado
Proliferan los castaños
Con su fruto madurado.
Un poco más adelante
Antes de atisbar Pombriego
Lo vigilan retorcidos
Alcornoques bien longevos.
Ensancha su cauce, el río
Regando a la ribera
Entra en vetustos molinos
Haciendo girar las ruedas.
Para deshacer el grano
De las espigas doradas
Alimentando a sus gentes
Y a sus pobres ganados.
A la llegada del Puente
Un poco más hacia allá
Vierte sus aguas al Sil
Para seguir hacia el mar.
Así completa el ciclo
Una y mil veces más
Evaporándose el agua
Volviendo a comenzar.
Río Cabrera que corres
Siguiendo tu caminar
Testigo de alegrías
De batallas sin final.
De dolores y desdichas
De éxtasis y de paz
Sigues fluyendo, sin pausa
Sin detenerte a juzgar.
Río Cabrera amado
Cuando me vaya,
Estarás.
Foto: Didier S.
Debería organizarse alguna acción para limpiar aquella suciedad que desaprensivos depositan en nuestro río y en los arroyos que a él confluyen. Triste muestra de mala educación y poco conocimiento de algunas de nuestras gentes.
Con el objeto de devolver la belleza que la mugre varia camufla y de concienciar a todos que el río y sus arroyos no son un vertedero de colchones, restos varios de obras, frigoríficos, bicicletas y plásticos variados, entre otros.
Como bien comentas, no sólo debería realizarse una limpieza de nuestros ríos, sino que también ponerlos en valor. En el ayuntamiento de Truchas hay un plan de desarrollo basado en el río Eria exportable al río Cabrera y al resto de arroyos de nuestra comarca. Si tienes interés te lo podemos hacer llegar. Escríbenos a lafueyacabreiresa@gmail.com. Un saludo
Bonito poema,sobre el río «Cabrera»