Las nubes

Son tan efímeras, tan cambiantes, que un segundo después de haber visto un gran castillo, o la boca de un dragón, se deshilachan y lo que antes, aparecía como algo tenebroso, ahora es una hada con sus alas abiertas o una casita de cuento.

A veces parecen bondadosas como un vellón de lana suave, otras, son oscuras y amenazantes, mientras algunas parecen ladrillos que cubren el cielo.
Nubes bajas: Cumulus, stratus, stratus cumulus, cumulonimbus.
Nubes medias: Altocúmulos, atrostratu y nimbostratos
Nubes altas :Cirrus, cirrustratus, y cirrucumulus, las de desarrollo vertical y las llamadas panza de burra en las islas Canarias, por su parecido con el pelaje del animal.
En las tardes de primavera cuando el sol, empieza a calentar, los cirrocúmulus blancos y gruesos que surcan el cielo, como barcas en un inmenso mar.
Los cirrostratos, velos pálidos y translúcidos, que en solo un segundo han cambiado, pasando de las fauces de un lobo hambriento, a una sirena subida a una roca, duran tan poco que con un pestañeo, ha cambiado totalmente.

Cuando el tiempo es gris, con una gran capota son los llamados Altoestratos, que van con la fuerza del viento, de un gris cambiante, presagian una tormenta.
Los Nimboestratos, son gruesas y oscuras, pudiendo predecir tanto lluvia como nieve.
Los Estratos, son los que nos dejan esa llovizna persistente, o lluvia meona, en otras partes, urballu, orballo, orbajo,depende zonas.

Los Cumulonimbos son formaciones de nubes gruesas y algodonosas, blancas u oscuras, presagio de tormentas.
Los Cirros son nubes compuestas de hielo, caracterizadas por bandas delgadas, que en los cielos presagian el cambio de días claros a la llegada de la lluvia, dentro de estas hay cuatro especies de cirros.

Las llamadas panza de burra, por su color blanco grisáceo, son las que pueden traer lluvia o nieve, o también las dos cosas a la vez.
Mientras se contempla el cielo, en días de tranquilidad sin grandes cosas que hacer, por momentos las nubes ligeras, surcan el firmamento, formando miles de figuras, que cada cerebro procesa a su manera. Otras veces son ilusiones ópticas que te hacen ver, a un un ejército de hombres, mientras otros ven un bosque de árboles frondosos.
Lo que sí es, que cada instante cambian de forma.