«Laciana-León, 1934. La revolución de los mineros», el libro que cuenta el camino de los mineros hacia la Revolución
El Club Xeitu publica este libro con textos de Antonio Fernández y Modesto Cadenas, dos de los mineros que emprendieron el viaje hacia la capital leonesa siguiendo el espíritu de la Revolución de Asturias de 1934
La noche del 5 al 6 de octubre de 1934 cientos de mineros emprendieron el camino desde Villaseca de Laciana hasta León para participar en la toma de la ciudad. El contexto fue la Revolución de Asturias de octubre de 1934, que tuvo amplio eco en la región leonesa, sobre todo en las cuencas mineras donde se concentraba gran parte de la masa obrera.
Dos de sus participantes fueron el minero Antonio Fernández y el pintor Modesto Cadenas, ambos socialistas y fusilados en la capital leonesa en 1936. Esta publicación recoge sus testimonios, en el que también aparecen mineros, obreros y dirigentes políticos como Alfredo Nistal, Carlos Valle, Florentino Monroy o Julio González. La revolución leonesa duró hasta el 11 de octubre cuando los mineros, ya de vuelta en Laciana, fueron reprimidos por columnas militares enviadas desde Ponferrada y León así como por aviones que bombardearon Villaseca con el objetivo de dispersar a los revolucionarios.
Antonio Fernández (1900-1936), fue trabajador de la Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP) en Villaseca de Laciana y durante los años de la II República asumió el cargo de secretario general del Sindicato Minero Castellano de León de UGT. Por su parte, Modesto Sánchez (1898-1936), popularmente conocido como Modesto Cadenas, nombre con el que firmaba su obra artística, fue un reconocido pintor de la época y miembro del sindicato UGT. Después de la Revolución, se exiliaron en Francia hasta la amnistía de 1936 decretada tras el triunfo en las elecciones del Frente Popular. Ambos fueron detenidos tras la sublevación franquista y fusilados el 21 de noviembre de 1936, en el campo de tiro de Puente Castro.