Actualidá y anuncias

La Diputación pide una salida que conecte el transporte de pizarra de Cabrera con la autovía de las Rías Bajas

Como consecuencia de la visita que el pasado martes realizó el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, a la capital de León, el presidente de la Diputación leonesa, Eduardo Morán, aprovechó para reclamar la corrección de algunas carencias que aquejan a la provincia


Entre las demandas solicitadas se encontraría la necesidad de llevar una conexión de Internet de calidad a todos los puntos del territorio leonés; la rehabilitación de las comarcas mineras; o, la que más afectaría a la industria pizarrera: el enlace de tráfico de Cabrera con la A-52 para dar salida a la comarca a una estación de AVE y favorecer al mercado de pizarra.
Esta posible conexión con Sanabria podría darse desde La Baña, donde ya existe actualmente una pista sin asfaltar que llega hasta San Ciprian. La futura carretera uniría Cabrera con la autopista de las Rías Bajas pasando también por Trefacio y El Puente de Sanabria.


Desde aquí el transporte de pizarra mediante tráileres podría continuar por carretera hacia sus destinos europeos ahorrando tiempo y evitando las carreteras comarcales de Cabrera. Otro de los puntos a favor es la futura estación del AVE de Otero de Sanabria, que sin ser una estación destinada a la afluencia de pasajeros, ya que su principal función será como PAET (Puesto de Adelantamiento y Estacionamiento de Trenes), servirá como lanzadera de trenes comerciales y de mercancías que podrían llevar la pizarra al puerto de Vigo y de ahí a otros destinos internacionales.
De realizarse este proyecto no se espera que se construyan grandes infraestructuras, como túneles que atraviesen rápidamente la sierra de Cabrera, ya que como Morán expuso a Fernández Mañueco en la reunión que tuvieron el marte “tampoco hay que pensar autovías o grandes carreteras, estamos planteando una vía que una la comarca con una línea de Ave en pocos minutos”.

Proyectos que no terminan de cuajar
La Diputación de León está llevando a cabo desde el año 2015 planes bianuales de mejora de las carreteras de la provincia que suponen una inversión de más de 50 millones de euros. Sin embargo, esta ayuda no termina de llegar a Cabrera, como es el caso de una licitación de 310.00 euros que se adjudicó en el año 2015 para el arreglo de la carretera al Campo de las Danzas que finalmente fue prohibido por la Junta de Castilla y León, al estimar que las canalizaciones romanas de la zona podrían ser dañadas por la maquinaria.
Castrillo de Cabrera es otro de los municipios cabreireses más castigado en este sentido, desde donde se ha venido reclamando desde hace años la renovación del firme, ya que el pavimento se encuentra muy deformado, así como una mejora de la señalización y los balizamientos existentes. Esta reivindicación se lleva realizando históricamente desde diferentes formaciones políticas, como en el caso del comunicado que presentó el Grupo Socialista en la Diputación de León en el año 2010, donde se indicaba que la LE-7311, la carretera que atraviesa el término municipal de Castrillo de Cabrera, uniendo Corporales, en Truchas, con Puente de Domingo Flórez, es “la carretera más larga y compleja”, situándola “entre las más peligrosas” de la red provincial y, “muy posiblemente, también la más abandonada por el PP durante los sucesivos años de gobierno en la institución provincial”.

Otro de los proyectos beneficiosos para la comarca de Cabrera que continúa estancado es el de la autovía Ponferrada-Orense, también conocida como A76. Una autovía que facilitaría el tránsito hacia las zonas portuarias de La Coruña y Ferrol, pero de la que la mayoría de su trazado aún continúa pendiente de licitación. Por otra parte, el que podría haber sido otro de los ejes importantes de comunicación con Cabrera, la fallida autovía León-Braganza, fue descartado por la Junta de Castilla y León en el año 2018 pese a contar con una amplia demanda popular.