El Santana

Y en el corazón de Ponferrada, entre calles estrechas se encuentra el Santana un rincón acogedor, único, con aroma a Silvan, fiel a sus gentes, a sus sierras y a su Cabrera. En honor a la Santa del pueblo nace el Santana, un lugar de encuentros, y de reencuentros, de acogidas y de bienvenidas, un lugar de paso obligado, un lugar para los besos y los abrazos, un lugar con esencia.

Y siempre con esa sangre cabreiresa corriendo por sus venas que lo han hecho especial y entrañable.

Un punto para las tertulias, para las charlas, para la diversión y el baile, un enclave acogedor y en un ambiente familiar y acogedor.

Más de cuarenta años de servicio, de puertas abiertas para todos, para los de casa, para los cabreireses, para los de fuera y siempre con  una sonrisa tras la barra, con una atención exquisita, siempre con un gesto de amabilidad tras el café, y siempre bajo una mirada de ojos azulados y brillantes llenos de agradecimiento.

Herederos de Silvan, hijos de una tierra,de una bandera, han sabido convertir al Santana en un pequeño rincón, en un trocito de Cabrera, en una vela encendida, en mitad de aquellas calles de Ponferrada.