El brote de fiebre hemorrágica en los ciervos provoca la solicitud de suspensión de la caza
PACMA encabeza la petición en respuesta a la inacción de la Junta
La propagación de la fiebre hemorrágica en los ciervos ha encendido las alarmas, lo que ha llevado al Partido Animalista Pacma a exigir la paralización inmediata de la caza en Castilla y León. Esta medida, que busca proteger tanto la biodiversidad como el equilibrio ecológico, es una respuesta a la crítica situación que atraviesan los ecosistemas locales, afectados por la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) y la elevada mortalidad entre las especies cinegéticas.
En las últimas semanas, numerosos ciervos han sido hallados muertos en la Sierra de la Culebra, y aunque aún no se han confirmado las causas exactas de estas muertes, la enfermedad hemorrágica ya se ha extendido a varias zonas de la región, amenazando no solo a la fauna silvestre, sino también a la ganadería. Con su alta mortalidad, la EHE está comprometiendo la supervivencia de los ungulados y, junto con las presiones propias de la caza, pone en peligro el delicado equilibrio de los ecosistemas locales.
Pacma advierte que la situación se ve agravada por otros factores, como la velocidad excesiva en las carreteras rurales, la falta de visibilidad y la deficiente limpieza de las vías, que elevan el riesgo de accidentes con fauna, sobre todo en los meses de verano. En este contexto, la formación animalista califica de «incoherente e irresponsable» que se permita el inicio de la temporada de caza, coincidiendo además con la época de berrea, un periodo crucial para la reproducción de los ciervos.
«La caza, bajo estas circunstancias, podría empeorar drásticamente la situación de unas poblaciones ya debilitadas por la enfermedad, causando un impacto irreversible en los ecosistemas locales», señala Pacma, que ha solicitado la suspensión inmediata de la caza hasta que la enfermedad hemorrágica esté bajo control y se evalúe el verdadero alcance de la mortalidad sobre las poblaciones de ciervos y otras especies.
Además, el partido insta a la Junta de Castilla y León a implementar medidas urgentes para mejorar la seguridad vial en las zonas rurales, como la reducción de la velocidad, la mejora de la visibilidad en tramos peligrosos y una limpieza más frecuente de las carreteras. También pide un plan de conservación y recuperación de las poblaciones afectadas, con estudios epidemiológicos, censos y acciones preventivas para frenar la propagación de la enfermedad.
Pacma concluye que permitir la caza durante la berrea no solo es «ecológicamente insostenible», sino que constituye una amenaza directa para la supervivencia de los ciervos en la región y, en consecuencia, para la estabilidad de toda la cadena trófica.