Celebraciones de enero
Acabadas las fiestas navideñas, con la visita de los Magos, en una semana y media llegaban a la comarca las nuevas celebraciones.
Cuando los carámbanos de casi medio metro de largo, pendían de los aleros de los tejados, llegaban las festividades. El diecisiete de Enero san Antonio o Antón abad. Llamado en las poblaciones Laconero o en otros lugares Cachuchero,(Cachucha, Careta de cerdo). En esta fecha, se llevan a bendecir las mascotas. En épocas pasadas se solía llevar al santo partes de los cerdos, tales como oreja, morro, la careta llamada cachucha, patas, etc, para que san Antón cuidase de los cochinos y no enfermaran. Por lo que el señor cura se encontraba con abundantes cantidades de la matanza, vendiendo alguna partes para misas al santo y dando buena cuenta de otras en su estómago.
El veinte son celebrados conjuntamente san Fabian y san Sebastián. El primero fue papa, el segundo mártir, invocado contra la peste.
El veintitrés del mismo mes, se celebraba san Ildefonso arzobispo de Toledo, desde la España visigoda.
Y el veintiocho, terminando casi el mes santo Tirso, que era invocado en los problemas óseos. Contaba la costumbre que santo Tirso era un gran bailarín, y debido a su afición tenía algunos percances.
De mis primeros años de infancia ya solo recuerdo:
Santo Tirso de Lardeira, por bailar perdeu a feira
Santo Tirso do Castelo por bailar caíu no suelo
Santo Tirso de Balouta, por bailar perdeu a bolsa. Etc..
En todos los festejos era tradición preparar la mesa con los productos del cerdo, para quitar los fríos que reinaban en este mes. Los embutidos , aderezados con bastante pimentón picante, para calentar y saciarse pronto, pues en la mayoría de los hogares no había la abundancia que se goza hoy.
Todos estos eventos, daban paso al mes de Febrero que en sus primeros días recordaban a las Candelas, o Candelaria y san Blas, con una hora y media más de luz.